Herida tras ser golpeada por una botella arrojada desde una residencia estudiantil

  • Una mujer de 37 años sufre lesiones leves tras recibir el impacto de una botella arrojada desde la residencia Emperador Teodosio.
  • Paseaba el sábado frente a la residencia, acompañada por su hija de 4 años y una amiga.
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Una mujer de 37 años (B. R. L.) resultó herida el pasado sábado, alrededor de las 21. 30 h, al recibir el impacto de una botella que una estudiante había arrojado desde la residencia Emperador Teodosio de la capital Segoviana.

Hasta tres veces tuve que llamar a la Policía para que alguien me cogiera el teléfono
La botella, una envase lleno de Coca-Cola de dos litros, alcanzó a la mujer mientras paseaba
con su
hija de cuatro años y una amiga por la calle Cantueso, frente a la residencia. El impacto
le dio en la cabeza por lo que la mujer sufre un
esguince cervical, contusiones leves en la cabeza y estrés postraumático, lesiones de las que fue atendida en el
Hospital General de Segovia. Aquí le recetaron calmantes para el dolor y valium.

"Todavía me estremezco al pensar que en lugar de a mí hubieran alcanzado a mi hija, que iba a mi lado", explica la mujer a '20 minutos'. "Encima, vi a la agresora, una chica de unos 20 años, que en lugar de bajar a interesarse por nosotras, se echó a reír diciendo que se le había caído, pero !si eso es imposible!, hace falta arrojar la botella más de 20 metros y dibujar una parábola". La amiga ayudó a la mujer, que estaba desorientada por el golpe, a volver a casa, donde intentó ponerse al habla con la Policía. "Hasta tres veces tuve que llamar para que alguien me cogiera el teléfono".

Me estremezco al pensar que hubieran dado a mi hija de cuatro años
Al final tuvo que desplazarse a la
comisaría de la calle Ezequiel González para cursar la correspondiente denuncia.

Preguntada por este diario, la directora del centro, María Esther Sánchez, niega cualquier relación de alguna de sus alumnas con la agresión: " Aquí tenemos a 90 estudiantes. No nos consta que el sábado pasara nada. Si la Policía o la interesada se ponen en contacto con nosotros, iniciaremos las investigaciones pertinentes, pero, de momento, ni a la Policía le consta que haya una denuncia ni a nosotros se nos relaciona con la agresión".

Más quejas de los vecinos

No es la primera vez que algún estudiante arroja objetos desde la residencia. Una vecina de la víctima dice haber esquivado un vaso de cristal que alguien arrojó hace tiempo. Por dejadez no denunció.

Por su parte, la Policía Nacional sí ha reconocido que la denuncia de lo ocurrido el sábado existe, aunque desconoce si se han producido más casos.

"Quiero seguir adelante con la denuncia, porque no me resigno a pensar que cosas así puedan volver a suceder. Ésa es una calle muy transitada, por donde pasan a diario muchos niños", se lamenta apenada.

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