Recordemos respecto a la negociación de los nuevos presupuestos del Ayuntamiento hispalense, gobernado por el PSOE en franca minoría, que ya el pasado mes de noviembre el primer edil anunciaba que propondría a las fuerzas de oposición; el PP, Ciudadanos, Participa e IU, un "acuerdo global" para las ordenanzas fiscales y los presupuestos municipales de 2019, al objeto de que más allá de la "confrontación política" asociada a las elecciones municipales a celebrar este año, la ciudad contase con tales instrumentos mediante un "acuerdo de mínimos" entre las diferentes fuerzas.

Así las cosas, el Gobierno local presentaba en su momento su proyecto de nuevos presupuestos, según el cual el Consistorio y sus organismos satélite contarían con más de mil millones de euros en ingresos y gastos, con una diferencia de algo más de cinco millones a favor de los ingresos.

ESPADAS PIDE AL MENOS UNA ABSTENCIÓN

Pero al no encontrar respaldo entre las fuerzas de oposición para aprobar su proyecto presupuestario, el socialista Juan Espadas reclamaba después a los grupos que al menos se abstuviesen y permitiesen la aprobación del documento, para que la ciudad cuente con un nuevo presupuesto en 2019. Y es que según viene avisando, la ciudad sufrirá supuestamente un perjuicio económico de unos "110 millones de euros" en caso de avanzar el calendario sin que el Ayuntamiento apruebe un nuevo presupuesto.

A tal efecto, el alcalde anunciaba recientemente que convocaría a los grupos políticos de la oposición para abordar la postura de cada uno de los mismos respecto a los nuevos presupuestos, bajo la premisa de que "no es tiempo de marear la perdiz, sino de decir ya si tenemos presupuesto o no".

En ese sentido, Beltrán Pérez replicaba después que "los flagrantes incumplimientos" del Gobierno local socialista respecto al pacto alcanzado entre ambas fuerzas el año pasado, para que el PP se abstuviese en la votación de los presupuestos municipales de 2018, permitiendo así su aprobación, situaban al PP "muy lejos del acuerdo presupuestario" con el PSOE.

Por eso, planteaba "un acuerdo extra presupuestario" que incluyese la convocatoria de 250 nuevas plazas de Policía Local y una nueva bajada de impuestos, "o no pasará nada por esperar a que haya un presupuesto en mayo", en referencia a la futura renovación de la Corporación local fruto de las elecciones municipales fijadas para dicho mes.

Ya este martes, Pérez ha opinado que los nuevos presupuestos "pueden ser el último gran fracaso de un alcalde incapaz de entenderse no ya con los que le hicieron alcalde, que fue la izquierda radical (en referencia a Participa e IU), sino incapaz de entenderse con nadie para sacar adelante ningún asunto", al estar "sumido en la soberbia, en la realidad paralela en la que no se solucionan los problemas reales de los vecinos y a los grandes eventos".

"Espadas ya no va a sacar proyectos adelante, ni grandes ni pequeños, como ha ido ocurriendo a lo largo de este tiempo", ha aseverado, avisando de que empieza "a pensar que lo mejor que puede pasar es que los próximos presupuestos los haga el próximo alcalde, que no va a ser Juan Espadas, sino un alcalde del PP".

No obstante, ha defendido que sigue "a la espera de que el alcalde cumpla los compromisos que se adoptaron para que se el presupuesto de 2018 fuera posible", insistiendo en que "si el alcalde quiere que se apruebe el presupuesto de 2019, tiene que negociar de una manera sensata, humilde y sin imposiciones, sin atacar a la oposición y sin incumplir sus compromisos".