Así lo ha manifestado el primer edil, en declaraciones a los medios, tras recibir al presidente de la Fundación Railowsky, Juan Pedro Font de Mora. Este pasado jueves, el pleno de Les Corts rechazó una enmienda a la totalidad del proyecto de Ley del Juego presentada por el PP, con lo que continúa la tramitación de la normativa.

Paralelamente, el pleno del Ayuntamiento acordó pedir que la ley incluya que los ayuntamientos puedan decretar zonas saturadas de establecimientos de juego o de especial protección par ala población vulnerable y que, además, determina distancias mínimas entre estos locales y centros educativos o espacios como residencias de mayores.

En la misma línea, Ribó ha afirmado este viernes que "se está incitando a la ludopatía" de una forma "descarada", por lo que el consistorio tiene "la obligación de poner cortapisas y de controlar seriamente" el juego.

El alcalde ha remarcado que "no puede continuar la situación de esta manera", ya que "en estos momentos hay datos de jóvenes que tienen problemas serios de ludopatía", así como de personas de "pocos recursos" y "a veces con recursos que están teniendo exactamente este mismo problema".

"Debemos conjuntamente con la Generalitat, porque en estos momentos Les Corts están trabajando una ley en esta dirección, colaborar y poner medidas restrictivas a que se puedan establecer todos estos centros, sobre todo evitar que haya procesos de saturación en determinadas zonas de la ciudad", ha zanjado.