El tráiler de la octava temporada de Juego de Tronos ha dado mucho de que hablar. Los fans de la serie de HBO se han vuelto locos analizando los pocos segundos de vídeo y sobre todo, han puesto el foco de atención en las estatuas de los Stark, especulando con los posibles significados que tienen.

Casi la misma importancia que los seguidores le ha dado el actor Kit Harington a su escultura, la cual pidió a HBO para quedársela como recuerdo, tal y como contó a BBC Radio.

"La mandaron a mi casa. La tengo en mi caseta. ¿Qué triste es eso? Fui el único que se quedó con su estatua. Así de narcisista soy. La voy a convertir en una instalación con agua decorativa", comentó Harington entre risas.

Además de hablar de de su estatua, el actor contó que él y el reparto estaban "rotos" después de grabar el final de la serie. "Es un poco raro, creo, para todos. Caminamos por ahí con este gran secreto, porque sabemos cómo termina todo", afirmó Harington.

Aunque no desveló ningún detalle sobre el final de Juego de Tronos, Harington sí dijo que aunque no está contento con el final, está "satisfecho". Mantiene sus anteriores declaraciones en las que afirmó que la última temporada será extraordinaria y cambiará la televisión.

"No terminas un buen libro y dices, 'estoy contento de haber terminado eso'. Tienes esta tristeza porque ha terminado. Es lo mismo después de hacer este programa durante nueve años. Da igual cómo terminó, siempre hay una parte de ti que dice 'oh', y hay un sentimiento de pérdida asociado con ello", confesó.

Menos pudor con el secreto que es el final de la serie tuvo Sophie Turner, que ha confesado haber desvelado lo que ocurre a algunas personas de su entorno más cercano.