Así lo ha indicado este jueves a los periodistas el concejal de Hacienda y Contratación, Manuel Bonilla, antes de iniciar una ronda de reuniones con agentes sociales, económicos y vecinales en "un proceso participativo para ultimar el proyecto".

El objetivo es presentar el borrador y escuchar y poder incorporar aportaciones, "dentro del margen limitado que tiene el Ayuntamiento de Jaén", con una de las situaciones financieras más complicadas entre los consistorios del país.

Ha recordado que el proyecto del presupuesto consolidado contempla un global de ingresos y gastos de unos 158 millones de euros con una reducción del 14 por ciento en ambas partidas con respecto al último presupuesto aprobado para 2017 y prorrogado el año pasado.

Bonilla, que ha explicado que ya está en Intervención municipal para que emita su informe, ha hablado de en torno a una semana y media o dos para recibir aportaciones de los agentes sociales para que "a principios de febrero se pueda remitir al Ministerio de Hacienda, cuanto antes, para obtener" su dictamen.

A su juicio, en él "no debe haber colores políticos" y si el Gobierno del PP "ha sido un aliado importante" del Consistorio, por ejemplo con adelanto PIE o dando "el visto bueno, con las condiciones que sean necesarias, a los presupuestos en 2015 y 2017, no tiene por qué haber más problema y el análisis no debe ser distinto" al de esos años.

"Intentaremos que se presente a aprobación inicial antes de que el gobierno municipal entre en funciones", ha afirmado cuestionado por la hoja de ruta para que entren en vigor. Precisamente sobre el horizonte de las municipales, ha apuntado que "la mayoría de ayuntamientos están incrementando sus presupuestos con fines electorales, y es lógico", pero el de Jaén no puede al tener "compromisos de reducción de ese gasto".

En este sentido, se ha referido al compromiso con Hacienda "de reducir un cinco por ciento los gastos de funcionamiento". Un nivel, según ha dicho, que se supera si, junto a los capítulos 1 y 2, se tiene también en cuenta cuatro, de transferencias y aportaciones a organismos autónomos.

El fin de todo ello es hacer un "Ayuntamiento sostenible en términos económicos" y alcanzar en 2020 el equilibrio en una administración que "lleva en déficit ordinario más de una década, desde 2006, 2007", y "a partir de ahí tener margen para ir devolviendo parte la deuda acumulada".

Ha matizado, en todo caso, que "sin la ayuda de todas las administraciones va a ser imposible". Al hilo, ha hablado del nuevo gobierno a punto de constituirse en la Junta como "una oportunidad histórica" para que el Gobierno andaluz, al que se viene, "reclamando ayuda específica para Jaén, pueda hacer sus aportaciones y colaborar".