No obstante, Caldentey ha explicado a Europa Press que las ventas quedan muy lejos de las cifras que se contabilizaban antes de la liberalización de las rebajas, de manera que los datos han bajado más de un 60 por ciento respecto a las ventas que se tenían cuando el periodo de rebajas tradicional estaba estipulado y cerrado a un periodo concreto del calendario.

De este modo, ha incidido en la importancia de que la Junta de Andalucía establezca un marco regulador que fije un periodo de no más de 20 días de rebajas al objeto de que las promociones estén más marcadas y el consumidor no vaya de "promoción en promoción y de descuento en descuento".

Así, ha indicado que durante las navidades las ventas han crecido entre un cinco y seis por ciento respecto a la campaña pasada, pero ha incidido en que los meses previos fueron especialmente duros con escasas compras por parte del consumidor que recordaban a la etapa más dura de la crisis económica.

Caldentey ha reiterado la necesidad de que las rebajas, que comenzaron el pasado día 7 y se extienden hasta el día 28 de febrero, se fijen como era tradicional en un periodo concreto y estén sujetas a un marco regulador, al tiempo que ha remarcado que a partir del 25 de enero las compras en rebajas decaen. Por todo ello, ha defendido el periodo tradicional de rebajas para incitar al consumo en una etapa más concreta.