Así lo ha indicado la Subdelegación del Gobierno en una nota en la que ha señalado que esta accidentalidad se ha producido en un escenario en el que los desplazamientos han aumentado un dos por ciento, el parque de vehículos ha aumentado un 1,85 por ciento en la provincia (situándose en 595.001 vehículos, con datos de octubre 2018) y el censo de conductores ha crecido un 0,06 por ciento, llegando a los 468.347 conductores (con datos de noviembre de 2018).

Estas cifras son provisionales y únicamente referidas a los accidentes mortales ocurridos en vías interurbanas y victimas tomadas hasta las 24 horas de producirse el accidente. Habrá que esperar a tener las cifras definitivas ya consolidadas en las que se incluirán las victimas a 30 días de accidentes ocurridos en vías urbanas e interurbanas.

En los últimos diez años, el número de fallecidos en accidente de tráfico ha disminuido un 38,7 por ciento (-12 fallecidos), pasando de los 31 fallecidos en 2008 a los 19 fallecidos en 2018. En ese mismo periodo, los desplazamientos de largo recorrido han aumentado un cinco por ciento, el parque de vehículos un 5,8 por ciento y el censo de conductores un uno por ciento.

Por sexo, el 79 por ciento de los fallecidos son varones, frente al 21 por ciento de mujeres, porcentajes que se mantienen estables desde hace años. Además, el 74 por ciento de los fallecidos tienen lugar en vías convencionales. Concretamente el año pasado fallecieron en este tipo de vías 14 personas, cinco menos que en 2017 (-35,7%). Los accidentes más comunes en las vías convencionales han sido la colisión frontal con 62 por ciento y la colisión lateral y frontolateral con un 15 por ciento.

En las vías de alta capacidad, los fallecidos han aumentado en un 26 por ciento respecto al año anterior. Así, en 2018 han fallecido cinco personas en autopistas o autovías, frente a cuatro en 2017. La salida de la vía es el accidente más frecuente con el 80 por ciento de los casos.

No se ha producido ningún atropello a peatón en este tipo de vía, aunque en el caso de las vías convencionales este tipo de accidente ha supuesto el 15 por ciento del total con dos peatones fallecidos.

Según los datos, se va confirmando la tendencia de que en los últimos años están aumentando los usuarios vulnerables fallecidos, y reduciéndose los fallecidos usuarios de turismo. En 2014 los usuarios de turismos fallecidos era el 67 por ciento y en 2018 el 63. En cambio, los usuarios vulnerables han pasado de ser el 12 por ciento en 2014 al 26 por ciento el pasado año.

La franja de edad con más fallecidos es la que comprende los 25 a 34 años de edad con seis fallecidos (el 32% del total), dos fallecidos más que el año anterior. De ellos, cinco han sido conductores y el otro un pasajero. En el año 2014, esta franja de edad representaba el 17 por ciento al igual que el año pasado. Le siguen los de 45 a 54 años con cuatro fallecidos (21% del total). En el caso de los jóvenes de entre 15 y 24 años hubo dos fallecidos (11% del total).

Con respecto al uso de accesorios de seguridad, el 25 por ciento de los conductores y pasajeros fallecidos en turismos y furgonetas (tres fallecidos de 13) en 2018 no llevaban puesto el cinturón de seguridad en el momento del accidente. Por su parte, los tres fallecidos en ciclomotor o motocicleta hacían el uso del casco.