En este sentido, la CES ha apoyado el dictamen final elaborado por el grupo de trabajo del consejo en el que, entre otros temas de interés, se

pide al Ayuntamiento ". Según señala en un comunicado, "en los últimos años, los empresarios han denunciado unos niveles de ejecución inadecuados, no sólo en las partidas de inversiones, sino en otras también importantes, lo que sin duda afecta muy negativamente a la economía de la ciudad y a la creación de empleo".

En este marco, los empresarios consideran que esta tendencia necesita ser "corregida" si se pretende que sea efectiva la reactivación económica, la creación de empleo y una mejor atención a los ciudadanos.

Así, ve preciso acentuar ese esfuerzo inversor en políticas de viviendas, en materia turística e industrial y, cómo no, en la reactivación de las zonas industriales, como "ejes fundamentales para la economía de la ciudad".

No obstante, los empresarios entienden que hay que destacar que, por primera vez, el Ayuntamiento de Sevilla se enfrenta, en este próximo año, a "un elemento negativo de principio y a la imposibilidad de hacer una previsión clara de las transferencias provenientes tanto del Gobierno central, como del autonómico, debido a que ninguno de ellos cuentan con unos presupuestos generales aprobados en sus respectivas cámaras".

Por otra parte, considera "muy preocupante" el retraso en el pago a proveedores, situado en cerca de 50 días, lo que "demuestra una falta de eficiencia administrativa que repercute muy negativamente en la empresa prestadora del servicio". "Y no sólo eso, sino que sitúa al Consistorio sevillano en una lista nada deseable, como el estar claramente por encima de los 30 días de plazo que establece el marco legal", advierte.

También, menciona la llegada de los fondos europeos provenientes de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrado (Edusi), apartado en el que también se pide un esfuerzo para ejecutar los distintos programas previstos, y la apuesta de la Agencia Andaluza de la Energía con incentivos, cofinanciados con los Feder y dirigidos a proyectos concretos, tecnológicamente avanzados, para una mejor eficiencia energética.