Los agricultores de la provincia han vivido una campaña de recogida de la aceituna –a la que apenas le quedan algunas semanas para finalizar– bastante tranquila, después de que en años anteriores el robo de este fruto se convirtiera en una constante. Según datos facilitados ayer por la Guardia Civil, a lo largo de la presente temporada olivarera, que comenzó en octubre de 2007, se han registrado 92 delitos de apropiación indebida de aceitunas en Córdoba, frente a los 246 que hubo el año anterior.

Esto supone un descenso del 62,6%. En lo que respecta al fruto, esta vez se sustrajeron 128.328 kilos, un 60,1% menos que la pasada campaña. El instituto armado señala que, de esta manera, sólo un kilo de cada 10.000 que se han recolectado ha sido robado. Además, este año no se ha registrado ninguna sustracción de aceite de oliva en las almazaras.

Operación Oro Verde

Gran parte del fruto robado fue presuntamente obra de un clan de nueve rumanos, detenidos por la Guardia Civil el pasado 12 de febrero en Fuente Piedra (Málaga) dentro de la operación Oro Verde y que habían actuado desde principios de enero en las provincias de Córdoba, Sevilla, Málaga, Granada y Jaén.

La Benemérita informa de que este grupo de europeos del Este sustrajo 164.470 kilos, de los que un 53% se llevaron de explotaciones situadas en Córdoba. El modus operandi comenzaba cuando, al elegir una zona para robar, realizaban un análisis pormenorizado del entorno.

Después se apropiaban de un camión o una furgoneta y actuaban de noche en las explotaciones. Todos sus integrantes han reconocido los hechos. Una vez desarticulado el grupo que había protagonizado varios hurtos de aceitunas en el último mes, la Guardia Civil ha podido recuperar unos 70.000 kilos del fruto sustraído. Lo que no han podido conocer aún los investigadores es el destino de las aceitunas robadas por este clan, ya que sus miembros se niegan a dar el nombre de su comprador «por miedo».