Donde habitan los fantasmas

«Sus aguas suberráneas favorecen la aparición de campos de energía», explica un experto en la Granada más mágica, que ha despertado una vez más con las especulaciones sobre ritos vudús tras el incendio de Dílar.
Puerta de la celda donde fue recluido y azotado San Juan de Dios, en el Hospital Real.
Puerta de la celda donde fue recluido y azotado San Juan de Dios, en el Hospital Real.
Núñez
Puerta de la celda donde fue recluido y azotado San Juan de Dios, en el Hospital Real.
Granada es una ciudad encantada. El agua subterránea (fuente inagotable de energía) y la imaginación hacen de la ciudad un lugar propicio para las apariciones fantasmales. Las especulaciones sobre si el origen del incendio de Dílar estuvo en un ritual vudú han despertado las viejas leyendas de la ciudad.

Aunque el delegado de Medio Ambiente, Gerardo Sánchez, haya reconocido que se apresuraron y que «lo que allí se encontró fueron unos frutos tropicales extraños bañados con miel, y nada más», las historias sobre reuniones aquelarres vuelven a estar de moda.

Juan Arcos, autor del libro 13 historias de fantasmas, casas encantadas y poltergeist hace un recorrido por la Granada más lúgubre. La ciudad, dice, «es propensa a este tipo de manifestaciones, tiene mucha agua subterránea y eso favorece la aparición de campos de energía». Los testimonios de los que han sufrido la visita de un espíritu señalan varios puntos en la ciudad, donde dicen que los muertos conviven con los vivos.

La Diputación: La actual sede del catastro es el inmueble maldito por excelencia. Edificado sobre varias mezquitas y la antigua iglesia de la Magdalena, son muchos los vigilantes que han dejado su trabajo. Archivos que se abren, máquinas que escriben solas, sombras...

Hospitales: Lo centros sanitarios son los lugares más propicios para las apariciones porque es donde más tránsito hay entre la vida y la muerte. Hace unos 20 años, una joven motorista que murió en un accidente se apareció a la anestesista y la recepcionista del hospital. En el Clínico también aseguran que una mujer fallecida durante el parto acompaña y charla con los visitantes.

La Chancillería: Los vigilantes aseguran que hay un fantasma con capa y sombrero que se pasea por las dependencias. Se trata del último verdugo que trabajó en el edificio.

Cruz Roja: Un antiguo militar se aparece por las noches. La leyenda cuenta que los voluntarios se entretenían por la noche convocando a los espíritus con la tabla ouija.

Carmen de las Ánimas: En las escaleras de la casa se apareció una mujer vestida de blanco y un borrego con una mancha negra. Un gran ciprés, al que partió un rayo,  preside este palacete encantado.

San Juan de Dios, en el Hospital Real

San Juan de Dios se aparece en el Hospital Real. La leyenda asegura que el sacerdote se pasea por el patio del Ciprés y la antigua capilla, lugares en los que solía trabajar. Los universitarios, además, dicen que han oído música de órgano y que a primera hora de la mañana las puertas se abren solas. Niños llorando y gritos de parturientas, algunos responsables académicos cuentan que las luces de los despachos se apagan y se encienden a su libre albedrío.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento