Amalia llegó al restaurante de First Dates con un look muy atrevido, que sorprendió a Carlos Sobera nada más entrar. "Que look", afirmó el presentador al recibirla, a lo que ella comentó que "me encanta parecerme a Lady Gaga porque me inspira en todo, su música me ayudó a salir de momentos difíciles".

"Creo que no soy una persona normal y no quiero fingir que lo soy. Creo que soy de otro planeta, sinceramente, y me cuesta mucho conectar con otro ser humano, para mí es lo más difícil del mundo", admitió en el programa de este miércoles en Cuatro la mejicana antes de conocer a su cita.

A Amalia no le gustó del todo su compañera porque, "aunque tiene una cara muy bonita y viste muy bien, las cejas se las pinta muy mal. Yo no tengo, y eso es chocante para la gente", comentó. En cambio, Aurora tuvo una mejor opinión de su cita: "Que se parezca a Lady Gaga me resulta atractivo. Me gusta mucho porque si busco a una chica corriente, hay un montón en la calle, y ella es diferente".

Pero el peor momento de la cena fue cuando Amalia le confesó a Aurora que ella roba productos de maquillaje en tiendas de multinacionales: "Yo llego y lo meto en la riñonera", afirmaba sin ningún pudor la doble de Lady Gaga, pero a su compañera no le gustó nada. "No me parece bien porque es algo que, en mi moralidad, algo impuesto desde pequeña, no me permite concebir eso como algo que se pueda hacer", afirmo Aurora por su parte.

Al final, Aurora rechazó tener una segunda cita con Amalia porque "creo que no tenemos tanto en común y lo que me nos me ha gustado de ella ha sido el tema de robar maquillaje y que no te importe que tu pareja se líe con otra persona", sentenciaba la madrileña.