Los tres acusados se encuentran en prisión provisional. La Fiscalía consideraba que los tres son autores de un delito continuado de robo con fuerza en casa habitada. A uno de ellos se le acusaba además de ser autor de un delito de falsedad en documento oficial y en ese mismo concurre la agravante de reincidencia con respecto al delito de robo.

Los dos primeros, para los que se solicitaba inicialmente cinco años de prisión, han aceptado dos años y su expulsión del país durante 10 años una vez cumplido el primer año en prisión.

El tercero de ellos, para el que Fiscalía pedía inicialmente 9 años de prisión y multa de 12 meses con una cuota diaria de 9 euros, ha aceptado una pena de tres años de cárcel y una multa de 1.080 euros. También será expulsado de España una vez cumpla dos años de cárcel.

LOS HECHOS

Según el escrito del Fiscal los acusados, de nacionalidad rumana, puestos de común acuerdo y formando un grupo especializado en la comisión de robos con fuerza en distintos domicilios del territorio nacional, llevaron a cabo numerosos hechos. Uno de ellos el día 23 de octubre de 2017, cuando tras fracturar el bombín de la cerradura de la puerta de una vivienda en la calle Los Trapones de Oviedo, accedieron a su interior. Una vez en el mismo, se hicieron con diversas joyas, que en parte fueron recuperadas y entregadas a su titular, causando deterioros por importe de 2.800 euros. Los daños fueron indemnizados por la compañía aseguradora Maphre por un importe de 1.060,10 euros.

Ese mismo día uno de los acusados vendió en un establecimiento comercial en la calle Palacio Valdés de Gijón una pulsera de oro blanco fruto de la sustracción. Se le abonaron 235 euros, al desconocer su titular su procedencia ilícita.

Más tarde, en fecha 12 de diciembre de 2017, y en virtud de un auto dictado por el Juzgado de Instrucción número 3 de Oviedo, se practicó diligencia de entrada y registro en las viviendas de los acusados, donde se ocuparon diversas joyas, entre ellas algunas provenientes de la vivienda de Los Trapones.

Ese mismo día 23 de octubre de 2017, en el mismo inmueble de la calle Los Trapones, pero en otro piso, los acusados fracturaron el bombín de la cerradura de la puerta de una de las viviendas pero no pudieron acceder a su interior. El propietario de la casa renunció a cualquier indemnización.

Un mes después, en la mañana del día 28 de noviembre de 2017, tras violentar la cerradura de la puerta de una vivienda en la calle Santa Engracia de León, los acusados accedieron a su interior. Se apoderaron de diversas joyas y de tres botellas de licor. Los efectos sustraídos, así como los deterioros causados, fueron satisfechos por la compañía aseguradora Ocaso, que reclama la cantidad de 1.087,81 euros.

Dos días después, el día 30 de noviembre de 2017, el tercero de los acusados vendió en un establecimiento comercial de la calle Montera de Madrid una de estas joyas, por la que obtuvo 355 euros.

En el momento de la detención de los acusados, uno de ellos, presentó un documento de identidad de Rumanía alterado, bien por él o por un tercero, y por tanto falsificado, ya que le constaban dos prohibiciones de entrada en territorio nacional, de carácter gubernativo. Prestó declaración en Comisaría bajo esa identidad falsa el 13 de diciembre de 2017.

En el interior del vehículo que utilizaban habitualmente los acusados fueron encontrados diversos útiles utilizados en la comisión de diversos robos con fuerza.