Ahora, sobre si debe aplicarse de nuevo, ha señalado que, aunque hay partidarios de ello, él aboga por "la vía del diálogo". No obstante, ha reconocido que, para ser efectiva, es precisa "una postura flexible por las dos partes".

Así lo ha señalado antes de participar en el Foro Gaceta de Salamanca, celebrado en el Hospes San Esteban, donde ha intervenido junto a la presidenta de las Cortes de Castilla y León, Silvia Clemente.

Sánchez-Terán, en atención previa a los medios de comunicación presentes, ha mostrado su convencimiento de que a la Constitución actual le quedan "muchos" años de vida, aunque el texto "habrá que reformarlo, como todo en la vida". "Ninguno estamos como hace 40 años, y la Constitución tampoco", ha ironizado.

Según sus palabras, esas modificaciones en la Carta Magna deben de ser "razonables" y "consensuadas" dentro de un documento que ha aportado a los españoles "tantas bondades, tantos avances, tanto progreso, tanta paz, tanta democracia y tanto desarrollo".

"La Constitución está viva, está vigente, hay que apoyarla y hay que reformarla por consenso, como se hizo hace 40 años", ha continuado el exministro salmantino, que estuvo en el Ejecutivo de la época del presidente Adolfo Suárez.

En cuanto a cuáles han de ser esos cambios dentro de "una reforma razonable", se ha centrado en tres puntos, que son los de la estructura territorial, la sucesión de la Corona y "algunos valores incluidos en los estatutos de la Unión Europea".

En cambio, sobre la petición de los partidos independentistas, Salvador Sánchez-Terán ha argumentado que "el derecho de autodeterminación no está en ninguna constitución democrática de los estados occidentales".