La demolición del puente se realizará en los próximos dos meses, cumpliendo de esta forma con la exigencia de Impacto Medioambiental que puso la Unión Europea para poder llevar a cabo la inversión de 14 millones de euros en la construcción de la variante de El Rocío que fue puesta en servicio en 2012, según ha podido saber Europa Press de fuentes de la Junta de Andalucía.
Una vez que se efectúe el derribo de esta infraestructura, la Junta iniciará la mejora medioambiental del vado de La Rocina, una actuación englobada en un proyecto mayor que supone otra inversión de 300.000 euros.
Cuando esté finalizada esta mejora ambiental, la zona donde se encuentra actualmente el puente de la Canariega, que ya no está en servicio, contará con una pasarela peatonal, un nuevo camino de tierra y se restaurará con arboleda autóctona.
La demolición del puente comienza después de un proceso de interlocución e información con todos los agentes implicados en la zona que exigían la construcción de dos nuevos accesos a la aldea por motivos de seguridad, que se culminó con una inversión de más de un millón de euros, además de la recuperación medioambiental de la zona.
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