La investigación a este grupo -en la que se han investigado a otras tres personas- se inició en 2017 cuando los agentes tuvieron conocimiento de la existencia de varias personas dedicadas al tráfico de drogas, ha informado la policía en un comunicado.
Los detenidos se dedicaban a gestionar cultivos de marihuana tipo 'indoor' en viviendas ocupadas o alquiladas para este fin, donde instalaban cultivos con lámparas halógenas de gran potencia, transformadores, ventiladores, aparatos de aire acondicionado y extractores.
El grupo tenía contacto directo con otros traficantes de Francia y Alemania, que recogían la droga empaquetada y la trasladaba a sus países, donde el precio de la marihuana se multiplica, puntualiza la policía.
Los principales investigados controlaban varios cultivos, y usaban a personas de nacionalidad extranjera con carencias económicas para que los custodiaran, a quienes pagaban el alquiler de la vivienda y les entregaban semanalmente pequeñas cantidades de dinero.
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