La configuración de estas salas, que dispondrán de 50 metros cuadrados de superficie cada una, permitirá ordenar el flujo de pasajeros y hará más cómodo el proceso previo al embarque de los vuelos, según ha informado Aena.

En el marco de este mismo proyecto, se destinarán dos áreas específicas a aquellos viajeros que, por el destino de sus vuelos, tengan que pasar el control de documentación. Esta actuación contribuirá a agilizar este trámite, lo que redundará en una optimización del tiempo de embarque.

La obra se acometerá minimizando la afección a la operativa habitual del terminal y al tránsito de los usuarios. Para ello, se adoptarán medidas como el refuerzo del servicio de atención al pasajero durante las franjas horarias de mayor afluencia de viajeros a las instalaciones.

Este proyecto se integra en el plan de calidad del aeropuerto, cuyo principal objetivo es ofrecer a los pasajeros la mejor experiencia posible a su paso por estas instalaciones.