Bruno Squarcia se incorpora hoy a la serie de Telecinco Yo soy Bea (L a V a las 16:00 h), donde interpreta a un noble ricachón al que Bárbara intentará echar el lazo.

Estirado, millonario, vividor... ¿Se parece a su personaje?

Hombre, pues sobre todo en lo de millonario, porque tengo mucha pasta, más que nada porque tengo un restaurante italiano (risas). Más que estirado yo creo que es un inocentón, por eso lo quiere pillar Bárbara.

¿De verdad tiene un personaje tantos matices?

Sí, tenemos una 'coach' fantástica, Amanda, que nos ayuda a enfocar los personajes, a definirlos bien.

¿Qué tal le han recibido?

Nunca tan bien como en esta serie. Enseguida he cuajado y el personaje ha sido recibido muy bien, aunque sólo llevo tres semanas de rodaje.

¿Tres semanas? Aún da tiempo a encontrarse con algún divo...

El que más va de divo suele ser el más mediocre.

¿Surgen muchos roces en los rodajes?

Pueden surgir, porque son muchas horas compartidas, una convivencia en toda regla, pero no suelen ir más allá.

¿Conocía a alguien del reparto?

A Amanda (la 'coach' o entrenadora e hija adoptiva de Sonsoles) y a Mónica Estarreado (Cayetana).

¿Tiene muchos amigos del mundillo?

Sí, muchos, además coincidimos mucho en el restaurante.

Y lo de relacionarse tanto con la farándula, ¿es bueno?

Se produce un contraste curioso, porque por un lado somos todos competencia de todos, y por otro lado tenemos los mismos problemas, así que nos sentimos un poco cómplices.

Coincidió con Bardem en Amo tu cama rica...

Fue una anécdota muy curiosa. A mi me habían dado una frase en la que era mi primera participación en una película, y a él un papel pequeño. Bardem dijo que no quería el papel, y me lo dieron a mí, pero poco después se lo pensó mejor, dijo que sí y yo me quedé con mi frase (risas).

Su personaje es noble, ¿cómo ve usted lo de la nobleza?

Depende del noble. Hay quien lleva el título con sencillez y sin darle importancia y quien le da más importancia de la que tiene.

¿Y si le dieran un título?

Me haría gracia, pero no me cambiaría la vida.

Háblemos de su restaurante.

Se llama "Oh.. babbo", significa "eh, papá" es un homenaje a mi padre, que era italiano.

¿Le gusta cocinar?

Es mi segunda pasión, en el menú hay varios platos inventados por mí.

También trabaja en el musical Quisiera ser...

Sí, hago de cuatro maridos diferentes de una misma mujer.

Serie, musical, restaurante... Los actores son unos vagos.

(Risas) Yo he perdido diez kilos... Mi profesión es maravillosa cuando trabajas, pero hay períodos en los que sin saber el porqué no sale el trabajo. Siempre se ve a los actores que trabajan, pero no a los que están en el paro, que son muchos.

Actor, de 44 años, trabajó en la empresa de pasta fresca de su padre en Valencia, donde jugó al baloncesto con el Pamesa Valencia. Su madre obtuvo el título de Miss Albacete.