El citado plan fue aprobado en 2016 para abarcar el periodo restante hasta 2019 y estaba articulado en tres programas de inversión: el Programa de Vías Locales de Interés Supramunicipal, el Programa de Instalaciones Deportivas y el Programa de Ciclo Hidráulico y de Residuos,

Ahora, para la edición de 2018, el plan cuenta con 1,6 millones de euros, que irán destinados íntegramente a la instalación de césped artificial en campos de fútbol municipales de localidades de menos de 15.000 habitantes, dentro del Programa de Instalaciones Deportivas, a fin de "cumplir con las previsiones de la planificación aprobada en 2016, en orden de culminar la completa ejecución del plan sobre la base de los déficit identificados", según el acuerdo recogido por Europa Press.

Así, estos 1,6 millones se dedican a la "implantación de césped artificial en los restantes campos de fútbol de titularidad municipal que en su día fueron diagnosticados en el segmento de localidades de menos de 15.000 habitantes".

Aunque el asunto ha sido aprobado por unanimidad, la portavoz del Grupo popular, Virginia Pérez, ha avisado de que más allá de la necesaria mejora de las instalaciones deportivas, "es bastante más importante" invertir "en el tejido productivo, la educación y la sanidad" de los pequeños municipios, avisando del coste de la instalación de césped artificial en los campos de fútbol y las diferentes necesidades que arrastran las localidades.

La portavoz del Grupo socialista, Trinidad Argota, ha defendido no obstante las políticas inversoras promovidas por la Diputación junto a la Administración autonómica, para que los pequeños municipios conserven sus habitantes a través de equipamientos que proporcionen calidad de vida, y la provincia no sufra el fenómeno de despoblación rural vivido en otros territorios de España.