Estas cifras representan un incremento del 2,5 por ciento en el número de sociedades mercantiles creadas en julio en comparación con el mismo mes del año anterior, el octavo mayor aumento de las autonomías que cayó en seis, se mantuvo invariable en La Rioja y subió en el resto con un incremento de la media nacional del 3,5 por ciento.

Además, Castilla y León se mantuvo invariable en el número de sociedades mercantiles disueltas (48 en total), frente a una subida del 8,0 por ciento en España. Se trata en este caso de la novena mejor evolución a nivel nacional, que bajó en ocho.

Según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) recogidos por Europa Press, Valladolid fue la provincia en la que se crearon más sociedades mercantiles nuevas durante el mes de julio (63) seguida de León (52). Por detrás se situaron Salamanca, con 21; Burgos, con 18; Segovia, con 17; Zamora, con 13; Ávila, con 11; Palencia, con 8, y Soria, con 4.

Respecto a la cantidad de capital suscrito, el mayor volumen correspondió a la provincia de León (13,25 millones de euros), seguida por Valladolid (4,12 millones) y Burgos (1,00 millones). Por detrás se encuentran Zamora (535.000 euros), Salamanca (243.000 euros), Segovia (215.000 euros), Palencia (156.000 euros), Ávila (105.000 euros) y Soria (63.000 euros).

Además, en el mes de julio un total de 88 sociedades mercantiles de Castilla y León ampliaron capital por un total de 13,76 millones de euros suscritos.

El mayor incremento de capital se produjo en Valladolid (3,48 millones a cargo de 27 sociedades), seguida por Burgos (2,57 millones por once sociedades), Salamanca (1,74 millones por seis sociedades), León (1,62 millones por 15 sociedades), Zamora (1,29 millones por siete sociedades), Palencia (1,15 millones por cinco sociedades), Ávila (1,21 millones por siete sociedades), Segovia (758.000 euros por siete sociedades) y Soria (15.000 euros por tres sociedades).

Por su parte, en julio de 2018 se disolvieron en Castilla y León un total de 48 sociedades, de ellas, dos sociedades se disolvieron por un proceso de fusión (en Palencia y en Valladolid) y el resto se disolvieron de forma voluntaria, menos siete que lo hicieron por otro método.

Finalmente, ninguna sociedad de Castilla y León desembolsó dividendos pasivos en julio y 16 redujeron capital por 4,18 millones.