En un comunicado, el organismo sindical ha indicado que "esta situación aumenta la conflictividad de internos que necesitan tratamientos médicos por sus problemas psiquiátricos o relacionados con toxicomanías, y, por otra parte, se producen más salidas de presos a un hospital, con lo que crece el riesgo de fugas".

"A comienzos del mes de julio, el centro penitenciario de Puerto I se quedó sin médico de guardia, por lo que, en casos de urgencia, son los enfermeros quienes tienen que asumir competencias que no les corresponden, autorizando evacuaciones al Hospital Universitario de Puerto Real", ha advertido el sindicato.

Para CSIF, la visita diaria de enfermeros, en lugar de médicos, a los presos en celdas de aislamientos incumple la legislación vigente. "Lo mismo ocurre con los exámenes que se les hace a los nuevos internos al ingresar; que deben ser realizados por médicos y no por enfermeros, según establece la ley", ha añadido el sindicato.

"Todos los internos de Puerto I están clasificados de primer grado -el régimen más estricto en la vida penitenciaria- y muchos de ellos presentan graves trastornos psiquiátricos y politoxicomanías, de modo que la atención médica se hace muy necesaria", ha continuado.

En este aspecto, el organismo sindical ha reseñado que esta situación genera "un profundo malestar" en la plantilla de funcionarios, ya que los trabajadores "no ven que la administración penitenciaria tome cartas en el asunto de forma definitiva para evitar los constantes conflictos que se producen entre los internos que no son tratados médicamente de forma adecuada".

Por todo ello, CSIF ha pedido a Instituciones Penitenciarias que cubra el servicio con los médicos que establece la Relación de Puestos de Trabajo para Puerto I y garantice la seguridad de la plantilla y de los propios internos.