El alcalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, acompañado por los concejales de Patrimonio, Carlos García Carbayo, y de Cultura, Julio López Revuelta, ha presentado este nuevo homenaje al insigne literato.

Ese epígrafe, realizado en sangre de toro, inmortaliza la cita recogida en su libro 'La tía fingida': "Advierte, hija mía, que estás en Salamanca, que es llamada en todo el mundo madre de las ciencias, archivo de las habilidades, tesorera de los buenos ingenios y que de ordinario cursan en ella y habitan diez ó doce mil estudiantes, gente moza, antojadiza, arrojada, libre, aficionada, gastadora, discreta, diabólica y de humor".

La ciudad de Salamanca ha sumado, con esta inscripción, un nuevo reconocimiento a Cervantes, que ya tiene un medallón con su efigie en la Plaza Mayor, del escultor salmantino Agustín Casillas; una calle que lleva su nombre en el Casco Histórico; y, entre otros, un mármol que, en los muros del edificio histórico de la Universidad de Salamanca que dan a la calle Benedicto XVI.

Este motivo junto al Estudio salmantino pregona desde hace un siglo la conocida frase de 'El Licenciado Vidriera': "Salamanca, que enhechiza la voluntad de volver a ella a todos los que de la apacibilidad de su vivienda han gustado".

Precisamente, en este mismo lienzo se puede leer una inscripción que recuerda el cuarto centenario de la publicación de 'El Quijote', que también se muestra al visitante en color de sangre de toro, como el recientemente inaugurado.