El alcalde socialista del Ayuntamiento de Sevilla, Juan Espadas, ha informado este martes de que en los próximos 15 días convocará una reunión con los representantes de los distintos centros sociales del Distrito Macarena y del Casco Antiguo para "buscar soluciones" ante este "problema" que genera "tensiones con los vecinos" de los alrededores.

Asimismo, durante estas semanas, se han llevado a cabo reuniones entre el gobierno municipal y los responsables de la Policía Local y Policía Nacional al objeto de hallar fórmulas con las que "reforzar" estos dispositivos de seguridad en dichas zonas. De hecho, "a determinadas horas del día, ya se está reforzando la presencia de estos medios" en dichos emplazamientos, según ha manifestado Espadas preguntas de los periodistas, tras visitar las obras del tanque de tormentas de Kansas City.

De esta forma, el alcalde ha reconocido que "el entorno de los comedores sociales o albergues, tanto de la Macarena como de algunos otros puntos del Casco Antiguo, de donde entran y salen personas que tienen problemas de distinto tipo, generan, en ocasiones, tensiones con los ciudadanos" y ha propuesto la búsqueda de "soluciones", junto con los vecinos, para encontrar un "equilibrio" de estas cuestiones.

Y es por todo ello por lo que el gobierno "está intentando atender esto desde un punto de vista integral" pues, para el alcalde, el mismo "no es solo un problema de seguridad o de atención de los servicios sociales, sino que es un problema más complejo", asegurando que "los ciudadanos lo saben".

De otro lado, el alcalde ha acusado a los representantes políticos de la oposición de "simplistas", puesto que "buscan la confrontación" ante una cuestión "más compleja de lo que cuentan" y lo único que consiguen es "agravar el problema".

PATRULLAS CIUDADANAS

En esta línea, Espadas ha opinado que "las patrullas ciudadanas no tienen sentido en una sociedad como esta", pues, según el mismo, "hay otras fórmulas para buscar soluciones a tales problemas, y los vecinos no deben hacerse cargo de lo que no les corresponde".

Aún así, el primer edil ha insistido en que los ciudadanos "no deben sentirse ni solos, ni al margen", refiriéndose a que las respuestas a este conflicto son una ocupación que debe dar tanto el Ayuntamiento como otras administraciones. Además, ha valorado que "en una mesa se encuentran soluciones" pero estas "deben hacerse desde la calma y la sensatez de no alarmar para que, de alguna forma se vuelva a la calma y al respeto de unos y de otros en la convivencia".