Tener que llamar cada mes a un camión cisterna para vaciar la fosa séptica o tirar las aguas fecales de una casa a la acequia más cercana es el día a día de 4.300 familias del municipio de Murcia, según los datos facilitados por la Concejalía de Infraestructuras y Servicios, y 13.000 según la oposición (PSOE).

El Ayuntamiento aún no les ha instalado el alcantarillado público en sus calles y muchos se ven obligados a pagar 200 euros cada vez que viene el camión cisterna a vaciar las fosas sépticas.

El pozo, un mal menor

«Tener un pozo séptico es malo porque sale muy caro que vengan a vaciarlo, pero no tenerlo es peor. Al final las aguas fecales terminan pudriéndose en las acequias y el olor es insoportable. Además, atrae insectos y es un foco de infecciones», explicó un vecino de Llano de Brujas (Murcia).

Por sus parte, el grupo municipal socialista califica de insignificante el dato facilitado por el Ayuntamiento, ya que en un estudio realizado por ellos en 2006 contabilizaron 13.000 viviendas sin alcantarillado. Además, explicaron que 500 de esas viviendas se encontraban en Llano de Brujas.

Aunque el Ayuntamiento niega la cifra del PSOE, sigue sin confirmar cuándo tendrán alcantarillas estas familias.