Según ha informado el Ayuntamiento, se han tramitado 22 quejas telefónicas alertando de la presencia de vendedores ambulantes en playas del municipio y se han realizado unos 30 controles de oficio.
En cuanto al material, se calcula que hasta finales de julio se han decomisado unos 300 kilos de pareos, gafas o sombrillas.
A esta cifra hay que añadir bebida y montones de comida que son destruidos puesto que sus nulas garantías sanitarias imposibilitan su donación.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios