Al menos diez personas han resultado heridas este viernes al irrumpir un hombre armado con un cuchillo en un autobús urbano en la ciudad alemana de Lübeck (norte), según el último balance proporcionado por la Policía del estado de Schleswig-Holstein.

Testigos del hecho citados por el diario local Lübecker Nachrichten han señalado que el autobús, que se dirigía a la localidad balnearia de Travemünde, iba lleno de pasajeros cuando uno de ellos repentinamente tiró su mochila al suelo, sacó un objeto punzante como un buril y comenzó a atacar a los presentes.

"No sabemos si fue verdaderamente un cuchillo lo que usó", ha explicado a DPA un portavoz policial. El conductor, que recibió un golpe del agresor, frenó inmediatamente el vehículo y abrió las puertas para que la gente pudiera huir.

Posteriormente, el atacante fue reducido y retenido por los propios pasajeros hasta que la Policía llegó al lugar de los hechos para detenerle. El cuerpo de seguridad ha confirmado en Twitter que un total de diez personas han resultado heridas, de las cuales algunas estarían graves.

La Policía también ha contado en la misma red social que la mochila que llevaba el atacante humeaba, de modo que, como medida preventiva, un equipo de artificieros la ha analizado sin encontrar explosivos, aunque sí un catalizador del fuego.

La Policía alemana no ha advertido indicios de un trasfondo terrorista en este ataque. "La identidad del atacante está aclarada. Es un hombre de 34 años de nacionalidad alemana y residencia en Lübeck", indicaron fuentes policiales de esa ciudad alemana a través de su cuenta en Twitter.

En el mensaje se añade que no hay indicios de una "radicalización política" en el atacante ni tampoco de un trasfondo terrorista.

El tráfico rodado se ha restablecido en la zona, después de que durante horas quedase cortado en un amplio radio de seguridad, mientras se sigue investigando el contenido de una mochila que quedó abandonada en el autobús.