En concreto, Faustino Temprano ha garantizado que los sindicatos no están dispuestos a avanzar en otras materias sin cerrar un acuerdo en torno a esta transposición, un documento "sencillo" sobre el que ya se ha llegado a un acuerdo entre sindicatos y patronal en el ámbito nacional.

Temprano ha detallado de este modo que ante la ausencia de acuerdo en este primer punto ha imposibilitado que se haya avanzado en la negociación sobre el Serla y sobre la estructura de la negociación colectiva en Castilla y León, ambos puntos previstos en el orden del día del encuentro que se ha celebrado este viernes en la sede del Consejo Económico y Social (CES).

"Todos los acuerdos dependen de la transposición", ha señalado Temprano, quien ha recordado que en 2015 no hubo problemas para rubricar un documento similar, entonces se trataba del Acuerdo para el Empleo y la Negociación colectiva de 2015, 2016 y 2017, un documento que posibilitó el primer acuerdo entre Cecale y sindicatos tras más de diez años.

No obstante, ahora la situación es diferente y, según los sindicatos, el principal escollo que frena a la patronal al firmar es el acuerdo es la posibilidad de fijar el salario mínimo de 1.000 euros, ya que "en Castilla y León, a pesar de la recuperación económica, los empresarios defienden que siguen en pérdidas".

Por su parte, Vicente Andrés de CCOO ha insistido en que la transposición del documento rubricado en el ámbito nacional es "sencilla", por lo que se ha mostrado "sorprendido" ante la negativa de la patronal que ha avanzado a los sindicatos que estudiará el documento y dará una respuesta antes del 30 de julio.

"Estamos preocupados, hablamos de un acuerdo muy potente, que es necesario para la economía para frenar la pérdida de poder adquisitivo", ha destacado Andrés, quien ha considerado que lo que firman las organizaciones tanto sindicales como de la patronal en el ámbito nacional debe "servir" también en Castilla y León.