El Grupo Especial de Venenos y Antifurtivismo (GEVA) de los Agentes Rurales ha denunciado a dos cazadores por repoblar conejos sin autorización dentro de un área privada de caza en el término municipal de Torà (Lleida).

Los cazadores denunciados habían liberado los conejos en unas instalaciones que podrían servir de aclimatación temporal para facilitar su adaptación al terreno y no pudieron acreditar la procedencia de los ejemplares animales, ha informado la Conselleria de Agricultura este miércoles en un comunicado.

Los agentes rurales incrementan las actuaciones en áreas de caza, muy especialmente en las que se ha detectado con anterioridad indicios o evidencias de una gestión incorrecta como es el caso de este coto.

La liberación y repoblación de conejo de monte en las comarcas de Lleida y Tarragona donde pueden ocasionar daños a los cultivos e infraestructuras agrarias está prohibida.

En las comarcas de Lleida, los daños provocados por los conejos en cultivos han hecho que en algunos municipios del Segrià se haya declarado la Emergencia Cinegética para hacerles frente y se organizan cacerías nocturnas para acabar con la plaga.

Las repoblaciones sólo se pueden realizar con animales procedentes de explotaciones cinegéticas con un programa de profilaxis y lucha aprobado por la Conselleria de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación de la Generalitat y está expresamente prohibido repoblar con híbridos de conejo de monte.

La repoblación de especies sin autorización y la alteración de los planes de gestión cinegética aprobados por la administración como herramienta de gestión en las áreas privadas de caza puede hacer que se produzcan desequilibrios en las poblaciones existentes en la zona o en su ecosistema y esto puede provocar daños a los cultivos agrícolas.

La Conselleria señala que el hecho de que no se siga un control sanitario puede originar una grave afectación a las poblaciones salvajes por contagio de enfermedades.