Al respecto, el colectivo señala sobre la plaza del Pumarejo que "la concentración en el entorno de recursos asistenciales y el deterioro social sufrido por sectores vulnerables como consecuencia de la crisis y las escasas e inadecuadas políticas públicas dirigidas a estas personas son algunas de las causas que están en la raíz de esta situación".
En ese sentido, APDH-A lamenta que ante las quejas de algunos residentes de la zona por los problemas de convivencia en la misma, el Ayuntamiento haya optado por "reunirse con parte de ese vecindario, obviando una vez más la participación de colectivos sociales que trabajan en el ámbito del sinhogarismo, los derechos humanos y la exclusión social o con las asociaciones vecinales del barrio".
Y especialmente, la asociación ha tachado de "deleznable" que fruto de tales reuniones, el Ayuntamiento haya decidido "la sustitución de parte de los actuales bancos de la plaza por otros antiindigentes".
"Poner en marcha una costosa respuesta policial cuyo único objetivo es dispersar la concentración de las criminalizadas personas sin hogar hacia calles adyacentes, es aberrante, como lo es convertir la Plaza del Pumarejo en un intolerante puerto italiano. El mensaje es demoledor, porque para el Ayuntamiento de Sevilla el problema son las personas pobres, no la pobreza", avisa APDH-A, que reclama la retirada del dispositivo policial "permanente" de la plaza del Pumarejo y desista de la sustitución de los bancos.
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