Según ha comunicado el Gobierno a través de una nota de prensa, la resolución del contrato vigente con la adjudicataria es el paso previo para poder encomendar a Tragsa la puesta en marcha "lo antes posible" de las instalaciones de pretratamiento, ya construidas.

Dado que el Consejo de Ministros autorizó la celebración del vigente contrato para el proyecto y ejecución de las obras correspondientes a la construcción de la estación depuradora de aguas residuales de Gijón Este, compete al Consejo de Ministros autorizar la resolución del mismo.

El Tribunal Supremo anuló la aprobación del proyecto de ejecución de la EDAR, por defectos en la tramitación de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), si bien la Audiencia Nacional decidió autorizar la puesta en marcha parcial de la depuradora, es decir la línea de pretratamiento (ya construida) para no empeorar la situación de los vertidos actuales.

El Ministerio ha explicado que ya se ha realizado un análisis de alternativas que definirá la mejor solución para la nueva EDAR, el cual será sometido al trámite de información pública una vez ultimada su redacción. Superado este trámite tendrá que remitirse al órgano ambiental que emitirá la correspondiente DIA.

Las obras de la EDAR Gijón-este, incluidas en el Plan CRECE, comenzaron el 19 de julio de 2012. Han tenido un coste de 35,5 millones de euros financiados al 100% por la dirección general del Agua (del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente), con un 80% de financiación europea con cargo al FEDER-Cohesión. Las obras, ya ejecutadas, finalizaron en marzo de 2016.