El candidato a dirigir Podem València, Jaime Paulino, ha defendido su proyecto este viernes, a tres días de que empiecen las primarias, para lograr que la formación aumente "de forma decidida" su papel en el Ayuntamiento. De cara a las elecciones municipales de 2019, ha asegurado que "importa poco la marca" y "se tenderá la mano seguro a otras fuerzas y colectivos", entre los que no ha cerrado la puerta a una posible confluencia con Esquerra Unida.

"Los partidos no tienen secuestrado a su electorado; hay que seducir a la ciudadanía", ha remarcado Paulino como premisa del proyecto "de fondo" de su candidatura, 'Movem València'. El proceso electoral interno cerró el censo la semana pasada y el periodo de votación se abrirá el próximo lunes, 11 de junio, hasta el siguiente 18. La previsión es que los resultados se conozcan tres días después.

En un desayuno informativo junto a la portavoz de València en Comú (VALC) -grupo municipal en el que está integrado Podem en el Ayuntamiento-, María Oliver, el también exsecretario de la formación ha apuntado como meta "consolidar el cambio" en València: "La prioridad en 2015 era echar a los corruptos, un clamor popular, y ahora es ir más allá del cambio político".

Para conseguirlo, ha llamado a seguir con la política participativa e "imaginar una ciudad distinta", al hilo de los procesos de remunicipalización que ha encabezado VALC estos tres años. Pero ve necesario que "Podemos cambie el foco de un trabajo fuertemente centralista, pensando en ocupar el Gobierno en Madrid, a descentralizar el horizonte político en los 'gobiernos del cambio'".

En esta línea "netamente municipalista", Paulino ha defendido que "importa poco la marca" con la que la formación morada se presentará en 2019 y ha avanzado que "se tenderá la mano seguro a otras fuerzas y colectivos", pero siempre con "Podem como eje central". "Podemos es el mejor anticuerpo contra la partitocracia", ha ilustrado.

La portavoz municipal también ha reivindicado la "línea muy clara" seguida por su grupo: "Somos la fuerza política, coja la forma que coja, con el objetivo de hacer llegar la voz de la ciudadanía". Y ha resaltado que han conseguido logros a pesar del peso "relativamente pequeño" en el equipo de gobierno.

Por tanto, ha coincidido con la necesidad de que la formación tenga "más fuerza" en el Ayuntamiento, en "un Govern de la Nau que siempre está entre PSPV, Compromís y València en Comú, negociando entre diferentes sensibilidades".

LAMENTA QUE IZQUIERDA UNIDA NO DIERA UN "PASO ATRÁS"

Preguntado por una posible confluencia con Esquerra Unida -tras la reunión de la pasada jornada con miembros de la dirección de Podem-, el aspirante ha indicado que "se ha mostrado desde el primer momento muy proclive a acuerdos electorales con Podemos". Ahora bien, ha remarcado que, "personalmente", hubiera preferido que en 2015 hubiera dado "un paso atrás con sus siglas", algo que "habría significado "dos concejales más para el cambio político" en València.

Ha insistido al respecto en la premisa de que "los partidos no tienen secuestrados a sus electorados" y ha defendido que, por contra, "hay que seducir a la ciudadanía". "No podemos esperar que la ciudadanía se 'enganche' a confluencias solo por las siglas", ha enfatizado, pero "sí tender la mano para un proyecto ciudadano de base, a 11 meses de las elecciones".

También sobre esta cuestión, la portavoz municipal ha abogado porque Esquerra Unida debe "enterarse bien de lo que es Podem" y asumir su código ético. "Lo que llamamos vieja política genera ventajas y contradicciones", ha ilustrado, para subrayar que "ese cambio no depende de las siglas".

Ha reconocido, eso sí, que las dos marcas -Podem y VALC- pueden haber "dificultado la comunicación directa con la militancia", aunque ha reiterado que, para 2019, "que sea Podemos, Izquierda Unida o València en Comú dependerá de la fuerza de cada una". Desde el grupo municipal, ha afirmado que "generar facciones o familias es algo absurdo". "Si mañana desapareciera Podemos o Izquierda Unida, el mensaje seguiría en la calle", ha zanjado.

CONFLICTOS INTERNOS

A modo de balance, Jaime Paulino ha reconocido la "parte de inexperiencia" de Podem en materia comunicativa y lo ha relacionado con la adaptación progresiva a la política institucional. "Cuando pides transparencia, no te puedes quejar de que salgan conflictos internos", ha aseverado, y ha bromeado que seguirán "aireando disputas políticas".

Oliver, por su parte, ha celebrado que Podem mantenga su independencia frente a "intereses y presiones económicas muy fuertes en València", una "estética" sobre la que ha lamentado: "Nos ha costado que la gente entienda que esa libertad provoca soledad en las instituciones; te siguen viendo como un bicho raro". Para superar esta imagen, ha apostado por explicar esas "contradicciones".

Por otro lado, preguntados por el edil Roberto Jaramillo ante una posible impugnación de su candidatura -como publica 'Valencia Plaza'-, ambos han coincidido en que la situación debe resolverse antes de que finalicen las primarias. "No puede quedarse en el limbo", ha defendido Paulino.

OPORTUNIDAD CON EL NUEVO GOBIERNO

Y en clave nacional, el candidato ha celebrado la "oportunidad" que abre el nuevo Gobierno socialista , si bien ha reiterado que tendrá que pactar con Podemos. Sobre la elección de los nuevos ministros, ha asegurado que "Pedro Sánchez se ha lanzado a gobernar, no a convocar elecciones".

La portavoz de VALC ve un "principio de ilusión" con este cambio, pero ha recordado que "el PSOE nos tiene acostumbrados a que se transforme en frustración". "Cuando llega la hora de la verdad, nos ha defraudado", ha lamentado.