Lambás considera que el proyecto tiene "poco sentido común" dado que junto con la construcción de residencias de mayores, clínicas, hoteles y restaurantes, hasta sumar 26.000 plazas residenciales, se contempla ampliar el número de viviendas en 1.400, sin que esté "garantizado" el abastecimiento de agua y con el impacto que supondría para el municipio el incremento "fuertemente extensivo" de su trama urbana en ese sector, con un aumento de la superficie a urbanizar de 300 hectáreas.

"Nos parece una auténtica barbaridad", ha subrayado el titular de Urbanismo en declaraciones recogidas por Europa Press, para después sugerir que el empeño por aprobar un proyecto que duda que pueda llevarse a cabo responde a que en octubre vencería el plazo y los terrenos revertirían de urbanos a rústicos, con la consiguiente pérdida de valor de los mismos y el perjuicio económico para la empresa promotora.

Pese a que TLP-IU votó en su día, junto con el resto de grupos salvo Ciudadanos de Centro Democrático-Candidatura Independendiente (CCD-CI), a favor de la aprobación inicial, el edil ha apuntado que a medida que fue conociendo los detalles de la Ciudad de la Salud constató que "tenía poco sentido común" y, tras consultar con su formación, optó por oponerse, al igual que el concejal de Bienestar Social y representante de Somos Aldeamayor, Joaquín Hernández, quien se integró en la Corporación Municipal hace sólo dos meses, como ha indicado en una rueda de prensa conjunta en la que también ha participado el portavoz del Grupo Provincial de Toma la Palabra en la Diputación de Valladolid, Salvador Arpa.

Lambás ha puesto en duda, asimismo, la financiación del proyecto, sobre lo que ha restado fiabilidad a los "rumores" que circulan acerca de posibles contactos con inversores árabes o chinos y ha recordado que existen informes tanto del arquitecto municipal como de la Diputación que desaconsejan seguir adelante con el proyecto.

También recela el concejal de Urbanismo de que su municipio pueda ser un destino demandado por ancianos y personas con problemas de salud frente a otros lugares con climas "más cálidos", al hilo de lo cual su compañero de Corporación Joaquín Hernández ha ironizado con la posibilidad de convertir Aldeamayor en un "Benidorm en el centro de España".

ZONA INUNDABLE

Hernández ha calificado el proyecto de Ciudad de la Salud como "otro episodio más" en el que las instituciones se sitúan "al servicio de las grandes empresas sin pensar en las consecuencias", pues el terreno donde se pretende instalar es "zona inundable" y con problemas de abastecimiento, de tal modo que "en diez años los vecinos tendrán que comprar agua embotellada para regar sus macetas".

Para el representante de Somos Aldeamayor, se juega con la promesa de "inversiones, trabajo, infraestructuras e ingresos para el Ayuntamiento", pero se oculta que "el día de mañana el Consistorio tendrá que asumir los servicios para toda esa zona".

Actualmente el equipo de Gobierno está integrado por los tres concejales de PSOE y los dos de Toma la Palabra y Somos Aldeamayor, mientras que forman el resto de la Corporación la concejal no adscrita Ana Belén Blanco, tres concejales del PP, uno de Ciudadanos y otro de CCD-CI.

Según ha explicado Lambás, de ellos Ana Belén Blanco se inhibirá en la votación por interferir su responsabilidad como edil con intereses familiares, mientras que el edil de CCD-CI, Félix Antonio Calleja, votará previsiblemente en contra, postura que ha mantenido a lo largo de la tramitación del proyecto, al igual que harán TLP-IU y Somos Aldeamayor.

De este modo, el resultado de la votación dependerá de lo que hagan PSOE, que según el concejal de Urbanismo "parece que son favorables al proyecto" -una "imprudencia", a su juicio-, si bien fuentes socialistas no lo han confirmado; Ciudadanos, y PP, los cuales tampoco han hecho público previamente el sentido de su voto. Dada la aritmética del Pleno, bastaría con el voto favorable de socialistas y 'populares' para sacar adelante la votación, lo cual sin embargo "no está claro", como ha reconocido Lambás.