Se investiga un delito de asesinato, en el que se sospecha que uno de los individuos habría intervenido como autor material y el otro como inductor. Tras la práctica de tres registros durante esta semana, la magistrada ha acordado levantar el secreto de las actuaciones.

Cabe recordar que el crimen de este joven que fue tiroteado cuando se encontraba en el interior de su vehículo el pasado 23 de enero en la pedanía murciana de Beniaján pudo ser un encargo, según se desprende de la investigación realizada por la Guardia Civil.

La cronología de los hechos se desarrolló cuando el fallecido fue sorprendido a la salida del gimnasio, al que solía acudir todas las mañanas, por una persona que aprovechó el momento en que éste había detenido el vehículo en el que circulaba en una señal de stop para mantener una breve conversación con él, la cual terminó cuando le disparó varias veces y huyó del lugar a pie, según comunica la Benemérita.

De la investigación se desprende que la persona que realizó los disparos lo hizo por encargo de una segunda, que mantenía ciertas rencillas con el fallecido y que, presuntamente, facilitó el arma homicida, una pistola del calibre 9 mm, al autor material del asesinato, al que, supuestamente, pagó cierta cantidad de dinero por consumar el ilícito.

La Guardia Civil de la Región de Murcia, en el marco de esta operación, denominada 'TURY', detuvo esta semana a estos dos individuos como presuntos autores del asesinato, a quienes se les atribuía la presunta autoría de los delitos de asesinato y de tenencia ilícita de armas. A uno de los arrestados, además, se le atribuía la presunta autoría de los delitos de tráfico de droga y de defraudación de fluido eléctrico.

La actuación se inició el pasado día 23 de enero, cuando la Benemérita recibió una alerta a través del '1-1-2' sobre el fallecimiento de un varón, por varios disparos de arma de fuego, hallado en el interior de un vehículo en una calle de la pedanía murciana de El Bojal-Beniaján.

La Guardia Civil desplegó un dispositivo policial dirigido a preservar la zona y a obtener del escenario delictivo indicios mientras, simultáneamente, se iniciaban las labores de investigación dirigidas a la identificación de posibles testigos que pudieran conducir a la localización y detención del sospechoso.

Después de más de tres meses de investigación y una vez recopilados los indicios y las pruebas necesarias que vinculan a los sospechosos con el delito investigado, la Guardia Civil, previa autorización judicial, registró tres inmuebles en las pedanías murcianas de Beniaján, El Raal y Alquerías.

En una de las viviendas fue desmantelada una plantación indoor de marihuana con 293 plantas cannabis sativa en avanzado estado de crecimiento, varias dosis de cocaína, gran cantidad de anabolizantes, así como los elementos necesarios para su dosificación y venta.

Este inmueble había sido conectado fraudulentamente al suministro eléctrico público, por lo que a su morador también se le atribuye la presunta autoría de los delitos de tráfico de droga y de defraudación de fluido eléctrico.

La investigación culminó con la detención de estas dos personas -varones, de 26 y 28 años, españoles y vecinos de las pedanías murcianas de Alquerías y Torreagüera- como presuntos autores de los delitos de asesinato y tenencia ilícita de armas.

Este viernes, 11 de mayo, las últimas indagaciones practicadas por los investigadores han culminado con la localización e incautación de una pistola, del calibre 9 mm., supuestamente empleada en el asesinato de la víctima, de la que se realizará el correspondiente informe pericial.