En este sentido, USO ha señalado que la movilización "plantea la eliminación de la (enseñanza) concertada, de la educación diferenciada y de la religión en los centros públicos, parte importante de la comunidad educativa, lo que supondría un ERE ideológico que afectaría a cientos de trabajadores en nuestra Comunidad Autónoma".

Por otro lado, FE-USO creé que aún es posible lograr un pacto educativo estatal, aunque las posturas "radicales" que han tomado algunos actores de la enseñanza pública "dificultan seriamente un acuerdo que dé estabilidad a la comunidad educativa y sobre todo a la calidad de la enseñanza", ha advertido.

USO ha exigido a las formaciones políticas que no cejen en intentar llegar a un pacto consensuado que beneficiaría a todos, sin exclusiones ni dogmatismos.

Al respecto, FE-USO ha insistido en que las propuestas de los convocantes de la movilización del 8 de mayo "atacan gravemente" a los trabajadores de la enseñanza concertada, de la educación diferenciada y a los profesores de religión de Cantabria.

Frente a ellos, USO apuesta por la complementariedad de las redes educativas pública, privada y concertada porque "todas son necesarias"; la defensa de los puestos de trabajo en la concertada, en la diferenciada y en el colectivo de profesores de religión de los centros públicos; y exige, como derecho fundamental, que se deje a los padres elegir libremente el modelo de educación que desean para sus hijos. FE-USO insta a la Administración Educativa a que lleve a efecto "de forma plena" este derecho constitucional.