Gijón es la novena ciudad española en la que más descendió la actividad económica desde el año 2000, según los datos del Anuario Económico 2007 de La Caixa. También es la localidad asturiana con mayor bajada del peso económico relativo, si bien Oviedo también ha experimentado una sensible disminución y ocupa el decimotercer puesto entre las ciudades con mayor descenso de la actividad económica.

Gijón es la decimoquinta ciudad más poblada de España, con unos 276.926 habitantes. Sin embargo, tan sólo ocupa el puesto número 22 en cuanto al índice de actividad económica, que mide la incidencia de cada localidad en la creación de riqueza en España.

La han adelantado ciudades bastante más pequeñas, como Castellón de la Plana o Burgos, por ejemplo. La economía gijonesa ha crecido durante estos últimos años: en 2005 se concedieron unas 5.000 licencias del Impuestos de Actividades Económicas más que en 2004. Sin embargo, el crecimiento económico de toda España ha sido sensiblemente mayor que el de la ciudad, lo que ha supuesto una pérdida, en apenas seis años, de un 17% del peso económico con respecto al total nacional. La riqueza que generaba Gijón en el año 2000 suponía el 0,651% del total de la economía española.

Según los datos de 2007, actualmente la ciudad representa tan sólo el 0,54% de la actividad económica del país.

El área de influencia de Gijón, por si fuera poco, es de las que tienen una menor capacidad de atracción -la tasa de atracción gijonesa es de un 1,1%-. Esto significa que  por cada  gijonés, tan sólo hay un asturiano de fuera de la ciudad que la visita para realizar sus compras o para llevar a cabo algún tipo de negocio.

Asturias, ligera ralentización

La economía asturiana sufrió una ligera ralentización durante el mes de noviembre, que se refleja en un menor gasto de las familias y en una bajada de la demanda de trabajo en el sector de la construcción, según los datos del Informe de Coyuntura Económica del Sadei. Los datos globales, sin embargo, son positivos, ya que se registró un crecimiento en la actividad industrial (incremento del 4,7%), en el turismo y en las exportaciones. El empleo también creció, un 3% en el último año.