Según informa la Comisaría Provincial en un comunicado, al individuo se le atribuye la presunta autoría de un robo tras forzar las máquinas de su propio establecimiento, y de una simulación del mismo en la denuncia que interpuso.
Las investigaciones se iniciaron cuando este hombre se recibió una llamada al 091 en la que comunicaba haber sido víctima de un atraco de madrugada en el bar que regenta.
Tras presentarse en el lugar de los hechos, una dotación policial recabó los primeros datos, comprobando cómo dos máquinas tragaperras, una expendedora de tabaco y la caja registradora habían sido forzadas y sustraída la recaudación.
La víctima les relató que, después de marcharse el último cliente, se dispuso a cerrar el establecimiento cuando, según dijo, "fue abordado por tres individuos con la cara tapada que le golpearon e intimidaron con una pistola y un machete y lo introdujeron de nuevo en el bar".
Mantuvo que, impotente, "vio cómo forzaban dichas máquinas y se adueñaban de las monedas de la recaudación de las mismas y de 160 cajetillas de tabaco, marchándose posteriormente del lugar".
Iniciadas las investigaciones tendentes al esclarecimiento de los hechos, los agentes reunieron los suficientes indicios para la atribución de responsabilidad del ilícito cometido.
Como consecuencia de la investigación y según las pesquisas de los agentes, se pudo determinar que el propio denunciante fue el autor de los hechos, con el objeto de obtener el dinero recaudado.
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