A paso ligero. Así recorrió ayer las calles del centro de la capital la Comitiva Institucional durante la celebración del 516 aniversario del Día de la Toma de Granada. La lluvia que cayó durante toda la mañana deslució y acortó los actos centrales previstos para rememorar la conquista de la ciudad por parte de los Reyes Católicos. El mal tiempo obligó a reducir el tiempo del recorrido entre la Catedral y el Ayuntamiento.

Aún así, muchos granadinos y turistas protegidos por sus paraguas aguardaban en la plaza del Carmen para asistir a la tremolación del Pendón de Castilla. La concejal de Turismo, Marifran Carazo fue la encargada de, como manda la tradición, tremolar tres veces el estandarte desde el balcón del Consistorio.

El pendón que se usa en estos actos es una réplica del confeccionado por Felipe II en 1616 sobre el modelo original de los Reyes Católicos, quienes entraron con él a Granada el 2 de enero de 1492.

Durante el acto, un grupo de ultraderechistas con banderas preconstitucionales profirió diversos gritos, aunque no hubo incidentes.

En contra Como ocurre desde hace ya varios años, los colectivos contrarios a esta celebración realizaron