A lo largo de los próximos meses, los especialistas implicados en este proyecto Life demostrarán la validez de esta tecnología eficiente para el tratamiento de aguas residuales, "disminuyendo así el impacto potencial de éstas sobre los ecosistemas acuáticos y evitando la degradación de los recursos hídricos y la pérdida de la biodiversidad", según ha informado la compañía en un comunicado.

El proyecto está financiado con fondos de la Unión Europea en el marco del programa Life 2016 y cuenta con un presupuesto de 2,2 millones de euros además de una subvención de 1,3 millones de euros.Life Newest tendrá una duración de 36 meses, durante los que se realizarán distintas tareas.

Según ha explicado la compañía, por un lado, proporcionará una solución "eficiente, económicamente rentable y medioambientalmente sostenible" para la eliminación de fósforo en aguas residuales depuradas, de acuerdo con la Directiva 2000/60/CE y con las prioridades fijadas por el Programa Life, además de garantizar su replicabilidad en, al menos, dos países de la zona euro (Holanda y Alemania).

Por otro lado, se evaluarán los fangos producidos al adicionar el nuevo polímero orgánico, tanto a nivel de producción de metano como de su calidad para compostaje y posterior uso agrícola. Es decir, "se potenciarán las actividades de reciclaje y reutilización del fango de estaciones depuradoras, creando sinergias con otras áreas políticas de la UE, como agricultura, suelo o residuos".

El objetivo del proyecto europeo Life Newest es eliminar el fósforo de las aguas residuales en las depuradoras urbanas e industriales y así valorizar el fango generado para fines agrícolas. Tras varios años de estudio, esta tecnología será validada a escala industrial en cuatro plantas de tratamiento de aguas residuales de origen urbano e industrial, con el objetivo de eliminar el fósforo en el efluente.

El proyecto Newest tiene previsto poner en marcha un nuevo sistema para la síntesis y producción industrial de un nuevo polímero orgánico de origen natural.