Los ganaderos detectan un incremento del consumo de conejo en Navidad

La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha detectado un "importante incremento" del consumo de
carne de conejo esta Navidad entre los murcianos, que no se ha traducido, sin embargo, en un aumento de la cotización de este producto en los mercados, sino en un estancamiento del precio.

Lo explicó a Efe el secretario de Organización de UPA, Manuel Zaragoza, que dijo que "todavía es pronto" para cifrar cuantitativamente el aumento registrado en el consumo, datos que se conocerán en un par de meses, aunque señaló que se ha equiparado la oferta con la demanda en las últimas semanas.

Zaragoza indicó que el aumento del consumo también ha conseguido que el precio de la carne "no se desplome" como suele ocurrir en esta época del año, y abundó en que los productores murcianos venden la carne de conejo a 1'40 euros el kilo, mientras que el consumidor lo puede encontrar en el mercado a unos cinco euros.

Señaló que las pedanías del norte de Lorca concentran el 60 por ciento de las granjas productoras de conejos de la Región de Murcia, donde existen 40 centros de producción cunícola con unas 50.000 madres censadas.

La recomendación del secretario general de Agricultura y Alimentación, Josep Puxeu, "ha surtido efecto y sus declaraciones han hecho que un determinado grupo de consumidores no habituales de ésta carne se decanten por comer conejo esta Navidad".

Asimismo, opinó que el sector avícola no se resentirá del ligero descenso, ya que los consumos de ambos productos no son equiparables.

En la Región hay unas 400 granjas de producción de pollos frente a las 40 explotaciones cunícolas, cuyo número se ha visto reducido desde el año 2002 a consecuencia de sucesivas crisis de precios.

Se estima que en la Región de Murcia se crían anualmente 2'3 millones de gazapos que suponen 4'7 millones de carne de conejo en vivo para sacrificio.

Los conejos ibéricos, la primera inocentada de Murcia:

La Comisión Ejecutiva Regional de COAG Murcia se reunió el pasado día 24. La decisión que se adoptó en dicha reunión fue la de promover la construcción de una gran explotación para la cría del conejo ibérico. La granja ocupará una extensión de 3.653 hectáreas, en una primera fase, en las que los conejos gozarán de una gran libertad de movimientos, tal y como si fueran conejos de campo, pero con la diferencia de que serán de la raza ibérica, conocida en España desde tiempos de los fenicios.

Su alimentación consistirá, esencialmente, de alfalfa y otras forrajeras al uso, cultivada bajo los principios de la agricultura ecológica, así como "jumas" de pino tierno, romero y otras especies arbustivas que realzarán el sabor de su carne.

En el perímetro de la explotación, que podrá ser visitada los días alternos y todos los festivos por los distintos grupos de consumidores, a modo de parque, dispondremos de mesas de unos 150 metros de largo en las que se servirá a los visitantes café a precio de coste, lo que supondrá una alternativa más a la renta de los ganaderos partícipes del proyecto debido a los fuertes ingresos que se esperan de las propinas que los ciudadanos.

Para resolver el grave problema del agua -el más grave de todos, sin duda, ¡si no esto no sería Murcia!-, para esta primera fase del proyecto se usará agua desalinizada convenientemente mezclada con agua de pozo, tanto para regar como para que los conejos beban. Para los visitantes, agua embotellada.

Para una segunda fase, ya que el terreno que ocupará la explotación será muy extenso -quizá, más de 43.000 hectáreas-, se está por la labor de que el posible trasvase del Ebro pase por el centro de la misma, con lo que el problema se habrá resuelto definitivamente.

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