"Lo que pedimos es lealtad al Gobierno en el cumplimiento de los acuerdos", ha subrayado este miércoles a preguntas de los medios en Alicante donde ha visitado una empresa de base tecnológica junto al alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri.

Cuestionado sobre las palabras de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que en València ha reclamado a las comunidades autónomas lealtad, Puig ha precisado que se logró un acuerdo y que quien "no está siendo leal es el Gobierno de España". Así, ha exigido "caminar por la lealtad de ida y vuelta".

Asimismo, interrogado sobre el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), del que Sáenz de Santamaría ha recordado que la Generalitat es una de las que más había recibido, el presidente valenciano ha matizado que la Comunitat Valenciana recibe "como crédito lo que otros reciben como financiación ordinaria". "La verdad, no sé dónde está el negocio y el éxito de esta cuestión", ha aseverado.

"Para que haya acuerdos, después de la Comisión de Expertos que emitieron un dictamen, es poner sobre la mesa una propuesta por parte del Gobierno", ha considerado y ha enfatizado que el Consell expuso su proyecto "para toda España, que habla de igualdad entre ciudadanos y singularidad entre territorios y de que no puede continuar la discriminación".

Así, sobre la base de la infrafinanción global del sistema de 16.000 millones, Puig ha defendido que el Gobierno debe "poner más recursos", "más racionalidad y menos arbitrariedad" y no continuar "insultando a la inteligencia con palabras como las de Feijoo -presiente de Galicia- o como otros que de vez en cuando lo único que están es faltando al respeto de los valencianos y a la inteligencia colectiva" .

30.000 MILLONES

En ese sentido, Ximo Puig ha manifestado que los valencianos prefieren "el método" gallego y que la financiación llegue de manera "ordinaria y no como crédito".

"Si hubiésemos tenido la financiación por habitante que tiene Galicia, desde el año 2000 hasta ahora sería más de 30.000 millones de euros los que hubiera recibido más la Comunitat", ha asegurado, aunque ha negado estar "en el debate de confrontación territorial, en el que al parecer alguno se ha empeñado en situarnos".

Con todo, el presidente valenciano ha insistido en exigir "lo que nos pertenece como ciudadanos españoles" para tener "igualdad de oportunidades que cualquier otro sitio de España".

"De lo que se trata ahora es de buscar una solución y en cierta medida hablar del pasado", ha continuado y ha afirmado que la deuda de 44.000 millones que arrastra la Generalitat es "en gran parte también porque recibimos menos recursos en el pasado". Y ahí ha situado la "reestructuración, condonación, compensación a la infrafinanciación de más de 15 años".

Finalmente, sobre la reforma del modelo de financiación ha explicitado que debe llegarse a dos acuerdos: Uno entre la comunidades autónomas y otro en el Congreso. Así, ha indicado que facilitará que haya acuerdos "en ambos foros", como president de la Generalitat y como "militante" y "responsable político en la Comunitat".