Em caso de que la propiedad del inmueble no cumpla con la orden de derribo, que tendrá que acometer en un plazo de 15 días hábiles y para el que deberá aportar el proyecto y dirección técnica visada por un profesional competente, el Ayuntamiento lo llevará a cabo de forma subsidiaria, repercutiendo posteriormente su coste a la propiedad.
Los técnicos municipales han comprobado que la edificación, de tipología unifamiliar tradicional y compuesta de dos plantas y buhardilla, con una superficie construida de 178 metros cuadrados, muestra "signos de prolongado abandono" y ha sufrido "varios derrumbes interiores y de cubierta".
Construido en 1920 según el catastro, el inmueble, que cuenta con muros de carga de ladrillo, estructura de madera y cubierta de teja árabe sobre ripia, presenta un mal estado generalizado, según determina el informe técnico, y su deterioro es de tal envergadura que se considera "totalmente inviable que se pudiera pretender proceder a su recuperación sin una reconstrucción completa".
Por ello, se declara en estado de ruina inminente y se ordena su demolición en un plazo máximo de 15 días hábiles, informa el Ayuntamiento en un comunicado.
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