El Metro de Barcelona incorporará 650 cámaras de videovigilancia en tres años –casi doblará el número actual– para mejorar la seguridad y avanzar en la automatización de la red.
En total habrá 144 trenes con 1.440 cámaras. Carecerán de esta tecnología los otros 26 trenes que integrarán la flota cuando abra la L9.
Ahora hay cámaras en 79 trenes de los 140, cada uno de ellos con 10. Tienen todas las líneas, salvo la L4 (amarilla).
Antes de 2010, el Metro sumará 99 unidades nuevas y reformará 42 más. Un tren tiene una vida de 30 años.
A los 15 son reformados (suelo, revestimiento, puertas, cámaras...) para que duren otros tantos más. El coste de las cámaras es mínimo en comparación con el valor de un metro nuevo (6 millones) o por hacerle un lavado de cara (600.000 euros).
Borrado de imágenes
Las imágenes grabadas en el interior de estos transportes (FGC también registra imágenes, como se vio con la agresión a la menor ecuatoriana) se borran a los pocos días. La Ley de Protección de Datos obliga a deshacerse de ellas en un máximo de 30 días.
Las cintas no se archivan y sólo se usan a posteriori si las piden los Mossos para investigar algún hecho delictivo.
Automatización de la red en 2008
Aunque ningún metro circula sin conductor, la intención es que a partir del año que viene funcionen las primeras unidades automatizadas en la L11. El proyecto se encuentra en una fase adelantada.
Es el mismo modelo que seguirá la L9, cuyo primer tramo se prevé que esté en funcionamiento en 2009. Para esta conducción es necesario un control de lo que pasa en el vestíbulo, los andenes y el interior de los vagones.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios