Según ha explicado la Policía Nacional en una nota, la investigación se inició a raíz de las pesquisas realizadas por la Unidad de Drogas y Crimen Organizado de la Comisaría Provincial de Cádiz, que tuvo conocimiento de un punto negro de venta de sustancias estupefacientes ubicado en una vivienda de El Palmar. Hasta la citada vivienda acudían a cualquier hora del día o la noche numerosos consumidores en busca de sus dosis diaria de hachís, marihuana y cocaína.

Así, fruto de los correspondientes dispositivos de vigilancia, se identificó en primer lugar a los ocupantes de la vivienda, y durante el transcurso de dichas vigilancias y seguimientos se llegaron a interceptar a cuatro compradores a los que se les intervinieron numerosas dosis de sustancias estupefacientes instantes después de abandonar la citada vivienda.

Tras recabar las pruebas incriminatorias, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Barbate, en funciones de guardia, autorizó la realización de las diligencias de entrada y registro sobre la vivienda investigada.

Así, en el registro efectuado se procedió a la detención de los dos investigados y se intervino una bolsa de plástico que contenía 93 gramos de MDMA, un total de 837 gramos de marihuana en forma de cogollos dispuestos para su consumo, 45,740 gramos de cocaína distribuidos en dos bolsas de plástico y un total de 23 papelinas ya dispuestas para su inmediata venta, un trozo de hachís con un peso de 13,960 gramos, una balanza de precisión y útiles para la manipulación de la droga, dos teléfonos móviles y la cantidad total de 3.318,66 euros distribuidos en diversos tipos de billetes y numerosa moneda fraccionada.

Según ha indicado la Policía Nacional, una vez finalizado el atestado policial, la Autoridad Judicial decretó el ingreso en prisión del principal investigado y la puesta en libertad con cargos para su pareja sentimental.