La investigación se inició en Gijón durante el fin de semana, cuando los agentes detectaron el comportamiento anómalo de una persona que mantenía contactos breves con otras con las que parecía intercambiar droga. Dado que el investigado ya tenía antecedentes por tráfico de drogas, los policías de la Brigada de Seguridad Ciudadana establecieron un dispositivo para su identificación y la comprobación de sus efectos.

En el momento de ser identificado, se le incautaron entre sus ropas varias papelinas de cocaína, heroína y trozos de hachís, así como una bolsa de sustancia blanca pendiente de análisis toxicológico. Posteriormente se comprobó que era vecino de Navia y que estaba alojado temporalmente en Gijón en un establecimiento hotelero.

Agentes del Grupo de Estupefacientes de Gijón se hicieron cargo de la de la investigación

y procedieron a la inspección de la habitación en la que residía. En ese lugar fueron halladas dos básculas de precisión, numerosos recortes de plástico para confeccionar papelinas y un trozo de hachís. El arrestado tenía antecedentes por tráfico de drogas y por robo con fuerza.