Los datos correspondientes a noviembre, consultados por Europa Press, muestran que Cantabria ingresó en los once primeros meses del año 1.894,4 millones y gastó 1.869 con lo que contabilizó un superávit del 0,19% del Producto Interior Bruto (PIB).

Estos datos de ejecución del presupuesto de Cantabria no incluyen las cuentas de las empresas públicas ni otras como las de la Universidad de Cantabria.

De los más de 1.894 millones que ingresó Cantabria hasta noviembre, la mayor parte corresponde a recaudación por IVA (471,2 millones), recaudación por el IRPF (467,4 millones), transferencias del Estado (464 millones), e impuestos sobre consumos específicos (que gravan el alcohol, el tabaco y los hidrocarburos, entre otros), con 195,9 millones.

Por su parte, las políticas sanitarias concentraron la mayor partida de gasto hasta el undécimo mes del año, con 758,4 millones, seguidas de las de educación, con 495 millones. Además, a los servicios sociales y la promoción social se destinaron 178,4 millones,

mientras infraestructuras tuvo una dotación de 157,7 millones. Sin embargo, ambas políticas de gasto fueron superadas por la deuda pública, a donde fueron 309,6 millones.

Hasta el penúltimo mes del año, el Gobierno de Cantabria contrató préstamos por 487,8 millones y amortizó 343,8 millones de deuda, con lo que el endeudamiento de la comunidad autónoma se situó en 2.791,4 millones, un 3,6% más que a comienzos de este año (2.694 millones en enero).