El nuevo centro cultural de la Marfà comenzará a construirse antes del verano

  • El diseño recupera las tres plantas de la fábrica.
  • La fachada original se conserva.
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El nuevo centro cultural de la Marfà de Girona
El nuevo centro cultural de la Marfà de Girona
Bàrbara Julbe
El nuevo centro cultural de la Marfà de Girona

Las obras de rehabilitación del nuevo centro cultural de la Marfà, incluido en el Plan de Barrios de la Generalitat, comenzará antes del próximo verano.

El proyecto ganador del concurso del edificio –una antigua fábrica de hiladuras- es obra de los arquitectos Pere Joan Ravetllat y Carme Ribas, que también rehabilitaron el Centro Cívico del Pont Major.

El diseño incluye la recuperación de las tres plantas de la antigua fábrica –conservando la fachada original-, la construcción de un pequeño edificio de planta baja al lado del futuro centro cultural que acogería la sala polivalente y el condicionamiento del espacio al aire libre que hay entre la Marfà y el centro cívico de Can Ninetes. El presupuesto del proyecto es de 3,2 millones de euros.

Futura distribución

Concretamente, según el proyecto, en la planta baja habrá el bar-cafetería y una parte de la biblioteca que estará repartida entre esta planta y la primera. En la primera planta, habrá el resto de la biblioteca y una sala preparada para acoger cursos de actividad física. En la segunda planta, habrá salas de ensayo (ocho en total) y otras salas pequeñas de reuniones y despachos.

En total, la superficie construida que ocupará el centro cultural es de 3.264 metros cuadrados, de los cuales sólo 172 se encuentran fuera del antiguo edificio y son los de la sala polivalente –de planta baja- que se construirá nueva al lado del centro cultural. El proyecto también incluye la recuperación de la

sala de turbinas que originariamente tenía la fábrica para aprovechar el cabal de la Sèquia Monar, que pasa justo por la parte de detrás de la fábrica.

Incluso en esta zona se trasladarán algunas piezas relacionadas con la historia industrial del barrio procedente del Museo de Historia.

Con las dos turbinas de la antigua industria y algún elemento hidráulico nuevo, el objetivo también es “aprovechar el salto de agua que ya tiene la antigua fábrica y poder generar energía”, según el concejal de urbanismo del Ayuntamiento de Girona, Joan Pluma.

La reforma de la Marfà está incluida en el Plan de Barrios de Santa Eugènia y, por lo tanto, la Generalitat pagará la mitad de los gastos.

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