La concejala de Sanidad y Consumo, Antònia Martín, se ha reunido esta semana con la Defensora de la Ciudadanía, Anna Moilanen, para poner en común posibles estrategias para resolver algunos de los problemas que más afectan a la ciudadanía en materia de salud, como pueden ser los ruidos y el control de las plagas, especialmente en las zonas de mayor vulnerabilidad.

Martín ha aprovechado la reunión para explicar la creación de un cuerpo de Inspección de viviendas y ruidos, dependiendo de su área y que actuaría en coordinación con el área de Urbanismo y el área de Seguridad Ciudadana, según informa el Ayuntamiento en un comunicado.

El objetivo de la creación de este cuerpo de inspectores es "mejorar la atención a la ciudadanía en cuanto a ruidos y reducir los tiempos de espera en la tramitación de expedientes" y permitiría dar respuesta a las demandas de la Defensora para "resolver los problemas de la ciudadanía en un tiempo aceptables y de forma sostenida", ha afirmado la regidora.

"Agradecemos el interés que ha demostrado la Defensora por esta cuestión desde el primer día y su predisposición para ayudar encontrar soluciones", ha afirmado.

EARRADICACIÓN DE PLAGAS

La concejala ha puesto de ejemplo de una buena práctica la actuación conjunta de las diferentes áreas en el barrio de Son Gotleu, con un plan de erradicación de las plagas, especialmente contra las ratas.

Martín ha asegurado que "el Ayuntamiento tiene mecanismos de intervención en los casos más graves, aunque sean dentro de una propiedad privada", si bien, ha señalado que la autorización de las actuaciones aún la administración "sigue siendo lenta".

Por su parte, Moilanen ha pedido que estas actuaciones se lleven a cabo también en otras barriadas de "extrema vulnerabilidad" con una población importante de personas mayores, como son las viviendas sociales de Camp Redó.