Según el Ministerio Fiscal, en el año 2005, un matrimonio contrató en Gijón los servicios del acusado, en su condición de abogado, para la interposición de una demanda, en vía civil, ante el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 1 de Villaviciosa por un problema de olores y ruidos que provenían de una explotación ganadera próxima al domicilio de la pareja, en el concejo de Villaviciosa.

El acusado recibió en concepto de provisión de fondos, por parte del matrimonio 6.406 euros en varios pagos desde el 8 de julio de 2005 a octubre de 2014. El acusado, valiéndose de su condición de letrado, mediando engaño y sin intención de interponer demanda alguna, se apoderó para sí de las cantidades recibidas y sin interponer demanda alguna ante el Juzgado, con el correlativo perjuicio económico para el matrimonio.

Según certificación del Colegio de Abogados de Gijón, el acusado causó baja colegial en mayo de 2013.

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito continuado de estafa y de un delito continuado de apropiación indebida y solicita que se condene al acusado, independientemente de que se tome en consideración uno u otro delito, a 2 años y 3 meses de prisión, inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena, pago de las costas procesales y abono de una indemnización de 5.815,26 euros.