La Giralda estará sin veleta al menos dos semanas, ya que hasta el 31 de junio o 1 de julio no está prevista la colocación de la pieza original, una estatua de bronce de 1.500 kilos de peso realizada por Bartolomé Moren en 1568, según explicó el director general de Bienes Culturales de la Junta de Andalucía, Jesús Romero.

Romero señaló que la operación de desmontaje "se ha desarrollado según lo previsto", con una primera fase que comenzó a las siete de la mañana en la que se ha desmontado y bajado el lábaro que tiene en la mano derecha el Giraldillo, y en una segunda, dos horas después en la que se ha bajado la veleta en medio del repique de las campanas de la Giralda.

Los trabajos han sido seguidos por numerosos turistas y sevillanos, y además, el desmontaje se ha podido seguir también a través de la página web del Ayuntamiento. Para estos trabajos se ha tenido muy en cuenta las condiciones meteorológicas, afirmó Romero, "porque a las siete de la mañana la velocidad del viento era menor".

La réplica del Giraldillo, que bajó envuelta en un plástico protector y con la ayuda de una grúa de 118 metros, pasará a los almacenes que Arzobispado tiene en Manzanilla (Huelva), para ser colocada próximamente -todavía no hay fecha exacta- en la Puerta del Príncipe de la Catedral de Sevilla, "justo en el enlosado que hay frente al Archivo de Indias", apuntó el director de Bienes Culturales.

Así los sevillanos y turistas podrán ver de cerca la apariencia y dimensiones del Giraldillo. En cuanto a la operación de subida de la pieza original, "será más sencilla", aseguró Romero, que adelantó que el Giraldillo será vendado y protegido por cuatro restauradores antes de izarlo a lo alto de la Giralda.

Romero dijo que la restauración a la que ha sido sometida esta figura del siglo XVI "posibilita su conservación por lo menos en doscientos o trescientos años".

Una vez subido el Giraldillo original, durante más de tres semanas permanecerán los andamios para hacer, mediante unos sensores colocados para la ocasión, un seguimiento del comportamiento de la veleta tras la restauración.

La operación de bajada de la réplica, una obra de José Antonio Márquez, y de subida del original tendrá un coste de 116.000 euros y los trabajos de restauración del Giraldillo han costado 600.000 euros.