Así lo ha explicado este miércoles a Europa Press el presidente de la Asociación Gremial del Taxi de València, Ismael Arráez, que ha indicado que la movilización incluye la entrega de un manifiesto en las Corts Valencianes, donde este jueves se debatirá en el pleno dicha norma legal. La marcha -que ha congregado a unos 2.000 conductores, según los convocantes- ha arrancado a las 10.00 horas desde las Torres de Serrano y transcurrirá hasta la Plaza de Tetuán.

Arráez ha lamentado que desde el gremio no entienden por qué se quiere cambiar la ley regulatoria del sector del año 2011, ya que fue "consensuada" y ha criticado que ahora se quiere aprobar una norma "partidista" que "barre" 39 de los 41 artículos que fueron acordados, lo que entiende que supone una "pérdida de derechos tremenda".

Este portavoz ha señalado que desde el Gobierno valenciano no les "escuchan" y "quieren imponer", por lo que ha afirmado que "llevan una línea dictatorial" y "desconocen el sector".

Entre las medidas con las que más discrepan estos taxistas, Arráez ha destacado que esta ley "puede dar pie a poner fecha de caducidad a la licencia"; que ante la "muchísima competencia" de VTC y "coches pirata" que "están haciendo muchos servicios ilegales" y ofrecen vehículos de 8 o 9 plazas, esta ley quita a los taxistas la posibilidad de emplear coches con esta capacidad, o una "expropiación encubierta", ya que "obliga a los trabajadores a vender sus vehículos si tienen más de uno" bajo la premisa "un autónomo, un titular".

"VA A ACABAR EN LOS TRIBUNALES"

Asimismo, ha asegurado que esta norma "va a acabar en los tribunales" porque opina que "va a hacer daño". Preguntado por la posibilidad de que recurran a la justicia para frenar esta Ley del Taxi, el presidente ha comentado que no solo puede ocurrir que la recurra la asociación, sino también que "cualquier taxista se plantee poner una denuncia".

El presidente de la Asociación Gremial del Taxi de València ha sostenido que les están "quitando su modo de vida" con una ley "política y partidista", mientras que ha explicado que no espera que ninguno de los grupos políticos que apoyan esta nueva ley se reúna con ellos. "Van a pasar el rodillo", ha lamentado.