Con motivo de estos hechos, la organización ha indicado que es "insoportable la situación que sufren las ganaderías extensivas en toda la provincia", pues "los ataques de lobos se siguen multiplicando mes a mes" y provocan "daños económicos cuantiosos a explotaciones familiares que no pueden aguantar más".

UPA-COAG ha reclamado a la Delegación Territorial de la Junta en Salamanca y a la Consejería de Fomento y Medio Ambiente que "actúe excepcionalmente" y autorice "de forma inmediata" controles poblaciones porque "la situación es dramática para los afectados".

"No solo el pago de las indemnizaciones por todos los daños deben hacerse de forma ágil, sino que además la Administración regional, como gestora de la fauna, debe controlar esta especie tal y como se ha comprometido la Consejería de Medio Ambiente en situaciones excepcionales como es la que se está sufriendo actualmente", ha añadido la organización profesional.